Uno de mis favoritos en la pedagogía Waldorf es, sin duda, la mesa de estación. ¿Has oído hablar de su uso y significado?.
Está presente en las aulas de todas las escuelas Waldorf, donde hay siempre una mesita decorada majestuosamente con elementos característicos del mes o estación en la que nos encontramos. Refleja lo que en el exterior acontece dentro del aula o del hogar.
La mesa de estación se transforma y va cambiando de color y forma a lo largo del año. Se va tiñendo de los colores que vemos en el exterior.
Es un excelente recurso para conectarnos con la naturaleza y los ritmos del año.
Ayuda enormemente a pequeños y mayores a desarrollar la atención y la curiosidad y nos invita a vivir las estaciones de una manera más consciente y activa.
¿Qué puedes encontrar en una mesa de estación?
Una mesa de estación está formada siempre de elementos naturales.
La base de las mesas de estación suelen ser las telas de lana o seda que tiñen de color como si de una escena se tratara. En Primavera predominan los colores de flores y campos: amarillos, verdes, rosas...
Siempre aparecen, además, figuritas que representan la estación. En primavera pequeñas haditas de flores del jardín y caminos. Están realizadas con lana cardada o fieltro. Tiernas y dulces alegran la mesa con bonitos y coloridos tonos. Son elementos simbólicos asociados con cada estación del año.
También podemos preparar animalitos o insectos de lana: liebrecitas, mariposas, pajarillos...
No pueden faltar las flores naturales, piedritas y demás tesoros que encontramos en nuestras salidas a la naturaleza.
Otro elemento muy utilizado en la mesa de estación son las postales con ilustraciones. En primavera prados y campos con flores, niños jugando entre flores, liebrecillas en los caminos etc.
Quizás puedas dibujar una en cartón o papel de acuarela y seguro queda fenomenalmente bien en vuestra mesa.
También podemos encontrar libros que muestran imágenes de la estación y quedan bien bonitos.
Las velas también son ideales y encenderán la magia del rincón especial. Encenderla cada día antes de desayunar o apagarla antes de acostarse en un regalo para la familia. Que sean de cera de abeja 100% es importante y la cualidad que se respira en el ambiente marca la diferencia.
Importancia de la mesa de estación
- Como has visto, se trata de un interesante recurso para conectarnos con los ciclos, el ritmo y la naturaleza.
- Invita a los niños a interactuar con materiales naturales: tanto de las figuritas como de otros elementos decorativos que tomamos de la naturaleza.
- Se desarrolla un respeto y cuidado por el medio ambiente así como cualidades de espera y observación.
- Es una oportunidad para poner en práctica otras cualidades como el sentido estético, el orden, organización y cuidado.
- Por supuesto, nos invita a salir al exterior para observar, recolectar, cuidar y disfrutar de un paseo con premio. ;)
Te invito, si todavía no lo has hecho, a que liberes una mesita o rinconcito o incluso balda, para montar y difrutar con tu mesa de estación.
Es un bonito ritual. Prepararla, cambiarla y redecorarla al comienzo de la estación te centra en la Vida. A los pequeños les encanta y disfrutan mucho con ella. Se fijan, observan y te pedirán modificarla con los cambios que van viendo en el exterior. ¡Anímate!
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